Los niños esperan su llegada mientras duermen, pero no es Santa Claus… son los Reyes Magos.
El Día de Reyes es una de las conmemoraciones más celebradas por niños de América Latina, principalmente por los regalos que los Reyes dejan bajo el árbol de Navidad cada 6 de enero. Es una tradición que, junto con la Rosca de Reyes, fue traída al continente durante la evangelización.
En México, es común que niños escriban cartas pidiendo juguetes, ropa y más. En todos los casos, van dirigidas a Melchor, Gaspar y Baltasar, a quienes la Iglesia Católica reconoce como los sabios que viajaron a Belén tras escuchar sobre el nacimiento de Jesús.
La tradición de escribir cartas y colocarlas al interior de un zapato no es única de México. Por el contrario, es bastante conocida y replicada por la población de otras naciones como Argentina, República Dominicana, Puerto Rico, Paraguay y Uruguay, por mencionar algunos.
Cartas en los zapatos
Mientras que en México y Argentina los niños colocan sus cartas en zapatos muy bien boleados, en Puerto Rico los más pequeños recorren parques en busca de pedazos de césped fresco que depositan en cajas de zapatos y colocan al pie de sus camas. El objetivo es que tanto el elefante, el camello y el caballo que transportaron a los Reyes Magos tengan alimento que les fortalezca durante su larga jornada.
“Para mí que fui niño y ahora soy padre de familia siento el deber de dar continuidad a la tradición”, dijo Andrés Utrera Jiménez, nutriólogo y padre mexicano de dos pequeños. “Sé que mis hijos harán la carta y que la van a poner en sus zapatos. Seguro van a dejar galletas, porque a mí también me enseñaron mis papás a dejar galletas para los Reyes Magos. Los enseño para que cuando ellos sean papás, le den a sus hijos la misma felicidad que yo recibí de los míos y que ellos reciben de mí”.
No más regalos, pero sí mucha celebración
El panorama es distinto en Paraguay, donde los Reyes Magos son asociados con una celebración local titulada la “Pascua de los Negros”, la cual arrancó en el país durante la colonia. De ahí que los Reyes Magos sean conmemorados con bailes callejeros al ritmo de tambores.
Al igual que en Paraguay, en Perú cayó en desuso el que los Reyes Magos den regalos a los niños la mañana del 6 de enero. Así, en lugar de “Día de Reyes” se le denomina “Bajada de Reyes”, que básicamente marca que una familia o comunidad realice una pequeña celebración mientras se desmonta el “nacimiento” donde reposa el “niño Dios”.
“En mi humilde opinión, considero que seamos de un país u otro, si bien no es una tradición originaria, no debemos dejarla morir”, dijo Andrés Utrera. “Es una buena tradición porque nos une, nos llena de alegría; por eso ha perdurado y por eso debemos guiar a las nuevas generaciones a seguir con ella”.
De vuelta en México, similar que en España, es costumbre que, tras la llegada de los Reyes Magos, se parta la tradicional “Rosca de Reyes”, un pan horneado y elaborado con harina de trigo y dulces. En su interior se coloca un “niño” de plástico o cerámica, así quien parta la rosca y “gane” al niño deberá repartir tamales entre los participantes el día 2 de febrero, durante la celebración de La Candelaria.
(Editado por Melanie Slone)
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