La última importación del Lejano Oriente no es algo que encuentras en WalMart. Se trata de certificados de vacunación COVID-19 falsificados, con errores tipográficos torpes, y el gobierno federal los está confiscando tan rápido como puede encontrarlos.
Los funcionarios de aduanas en cuatro ciudades estadounidenses confiscaron recientemente envíos de más de seis mil certificados de vacunación COVID-19 falsos que se enviaron desde China.
Dos lotes recientes ingresaron a Estados Unidos por el aeropuerto de Pittsburgh, Pensilvania, el 24 de agosto. Los funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos confiscaron 20 tarjetas falsas, determinaron que eran de baja calidad y que habían sido importadas por alguien sin educación médica.
Después, los funcionarios de aduanas de Pittsburgh pillaron un envío de 50 tarjetas, el 7 de septiembre. Ambas tenían como destino la misma dirección en el condado de Beaver, que se encuentra justo al noroeste del área metropolitana de Pittsburgh.
Dos de los lugares más recurrentes para encontrar certificados falsos de vacunación son los aeropuertos de Memphis, Tennessee, y de Anchorage, Alaska. Los oficiales de aduanas de esas ciudades han incautado de manera conjunta un total de más de seis mil tarjetas hasta el mes pasado.
Los funcionarios de aduanas del Aeropuerto Internacional O’Hare en Chicago interceptaron un paquete con 19 certificados falsos de vacunación COVID-19 provenientes de China, con dirección a un residente de la pequeña ciudad de Wapakoneta, en Ohio.
Comprar, vender y usar tarjetas de vacunación falsificadas es un delito, y pone en riesgo la salud de otras personas, dice el FBI. El uso de un sello oficial de una agencia gubernamental sin autorización se castiga con multas y hasta cinco años de prisión.
“Personas sin escrúpulos que venden tarjetas de vacunación COVID falsificadas” son una amenaza para la salud pública, dijo William Fitting, director de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos en el puerto de Pittsburgh.
Si bien las identificaciones falsas para permitir que los menores consuman alcohol o los cruces fronterizos ilegales han sido un problema persistente durante mucho tiempo, las tarjetas de vacunación contra COVID-19 son un nuevo giro para los cazadores de falsificaciones federales.
“Los falsificadores son astutos y siguen las tendencias en las demandas de los clientes, incluida la alta demanda de certificados de vacunación durante la pandemia”, dijo LaFonda Sutton-Burke, directora de operaciones de campo de Aduanas y Protección Fronteriza de Chicago.
Las autoridades no han revelado las identidades de los destinatarios previstos de las tarjetas falsas. Pero al menos se ha arrestado e identificado a un usuario de un documento falsificado: Chloe Mrozak, de Illinois fue encarcelada en Hawai, después de llegar al Aeropuerto Internacional de Honolulu el 23 de agosto. con un certificado falso de vacunación que quería usar para evitar una cuarentena obligatoria posterior a su llegada. El detalle que ayudó a las autoridades fue que el documento que Mrozak mostró se refería al fabricante de vacunas Moderna como “Maderna”.
Traducción de Yerem Mújica; editado por Yerem Mújica y Melanie Slone
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